TÚ NO ERES ESPECIAL


¿Perderás credibilidad y clientes? Una voz bajita me susurró al oído al ponerme a escribir este post, si hay algo que busco en la vida es ser honesta, ¡y ser honesta no es un trabajo sencillo ni gratificante!
 “Tu No eres especial”, decía el título del capítulo 3 del libro “El sutil arte de que todo te importe un Caraj&” de Mark Manson, esta sutil frase me abrió los ojos a la libertad que hacía un buen tiempo estaba buscando, pero sobre todo que estaba sintiendo y compartiendo. Por fin  ya no sentía que era la única que no busca auto motivarse, llenando mis diálogos y conferencias sobre lo especiales que son.
Ser honesto es un viaje al interior de nuestros miedos, de las ideas de nosotros mismos, de nuestros valores y atrevernos a cuestionarlos, ¿lo más complejo? decidir cambiarlos. Sí, decidí cambiarlos, ¡¡¡esa idea que defendí por años como verdad absoluta!!! ahora tendré que decir que ya no la comparto. ¡¡¡Qué roche!!! Sí, ¡¡¡pero es honesto!!!
Hace un tiempo atrás veo y hablo sobre esta especie de sobre información a la que tenemos acceso,  pareciera que ésta nos ha convertido en gente más irritable, quejosa y con derecho a decir y despotricar de todo y de todos, ¡es que somos especiales!
Estamos bombardeados por un lado de aquellos exitosos, espirituales, felices y bellos, al otro lado están los totalmente perdidos y desprotegidos. La lucha por la felicidad, o en términos espirituales, prosperidad y abundancia, pareciera el estado en el que estamos obligados a vivir, “Lucha por tus sueños” ¿y si no? Si no estamos en ese lugar somos fracasados, no estamos haciendo lo suficiente, necesitamos más libros, más seminarios, más y más y siempre hay otra montaña que conquistar.
No se trata de no lucha, se trata de elegir ¿por qué quieres luchar?
Voy a centrarme en este lado de la historia ya que estoy en el supuesto negocio del “Coaching: la reprogramación de la mente” y la felicidad, como estado deseado.
Por mucho tiempo cual conejo fui tras la zanahoria de la ilusión de la felicidad, la grandeza de un mundo sin problemas. Cada vez que aparecía una situación compleja sentía que no estaba haciendo lo suficiente, que estaba rota. He asistido a terapias, rituales, clases, lecturas, ¡¡todo o casi todo creo!!
Y no fue sino hasta hace muy muy poco que decidí aceptar mi luz y mi oscuridad, decidí que hay cosas que nunca cambiarán, que sin importar cuántas veces me repita frente a un espejo que soy poderosa, hay cosas que me seguirán cagando de miedo. Descubrí que el trabajo era la honestidad de mirar hacia mi interior, conocerme, gestionarme. Inicié el mejor de los viajes que es estar presente, disfrutando de las pequeñas grandes cosas de la vida, descubrí que los problemas siempre estarán y que eres tú quien decide cómo vivirlos, que tengo una vida maravillosamente promedio y ¡¡¡que está bien!!!
No seré un Gurú con respuestas para todo, como me hicieron creer o te hacen creer en los programas de entrenamiento de “La Mente”.
¡Sí!, soy una persona promedio, con problemas comunes, que un día decidió hacerse responsable de cómo vivirlos.

Comentarios

  1. En psicologos madrid centro estamos completamente de acuerdo contigo, es verdad que muchas veces nos pensamos que somos especiales para criticar todo, pero resulta que, somos más comunes de lo que nos pensamos.
    Si es cierto que cada cual tiene una mejor capacidad para una cosa u otra, pero, estamos dentro de un grupo con esas capacidades.
    Muchas veces al dejar de pensar que no somos tan especiales, también nos quitamos de dolores de cabeza porque nos dejamos de quitar todo ese peso de encima.
    Me ha encantado tu entrada!

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